24 nov 2011

Mil Disculpas

Distinguidas y amadas lectoras:


Siento muchisimo, enserio lo lamento mucho, no debi dejar por tanto tiempo algo que realmente me fascina... ESCRIBIR.... pero la presión del colegio, el ultimo año para ser exactos, la venida de algo que en verdad me aterra.... LA UNIVERSIDAD, anque mi carrera este decidida y mis animos muy en alto, siempre me entra el miedo.... al cambio... la nueva rutina, los nuevos amigos, todo....
Espero comprendan la demora de los capitulos, pero les prometo que tratare este fin de semana, de escribir varios capitulos y colocarlos durante la semana, claro si aun soy aceptada?????


Gracias por su comprensión mis adoradas lectoras, espero sigan disfrutando de la magia que transmite el maravilloso arte de escribir.
Que Dios las guarde y bendiga siempre.


Atte.
Kimberdly...

17 sept 2011

Capítulo 15

Llegue sin inconvenientes a mi destino, el vuelo fue muy cómodo y a la vez tan fugaz, no hubo tiempo para arrepentirme, no había vuelta atrás…
Busque mi equipaje en la terminal, mientras llamaba a una empresa de transporte en busca de un taxi, necesitaba alojarme en algún hotel cercano hasta que mi departamento este disponible, pero sobre todo necesito mis ánimos para iniciar una nueva vida en un lugar que desconozco por completo…
Investigue un poco acerca de París, descubrí en mi guía turística un bello hotel ubicado al frente de la Torre Eiffel… “Square”, había oído excelentes referencias acerca de este prestigioso hotel 5 estrellas, al final Luna y yo decidimos hospedarnos ahí, era cómodo, lujoso, pero sobre todo tiene la mejor vista de la ciudad, algo que me fascina…
Una vez instalada procedí a realizar unas llamadas de urgencia, ya que debo avisar a mi familia mi nueva ubicación, si no se preocuparan mucho, además necesito ubicar a Andrea, es mi bailarina estrella, la necesito para seguir los ensayos de la gira…
Encino –  Los Ángeles – Residencia Jackson – Narración de Michael:
En mi vida me había sentido tan solo, tan destruido, tan culpable… había sido el responsable de quebrar en mil pedazos el corazón más dulce de este mundo, el que con inocencia y fantástica pasión se entrego a mi y mira como le pago…
¡Dios!, es acaso esta una prueba, por favor te suplico me ayudes a afrontarla, necesito fuerza y valor para remediar el mal que he hecho…
Mientras ahogaba mis sollozos en silencio y rogaba con todas mis fuerzas un poco de compasión para tanto dolor, fui sorprendido por una reconfortante visita…
-          Michael, necesito que dejes de llorar y me expliques de una vez por todas que demonios paso esa noche… - Janet irrumpió en mi habitación como un fugaz y dinámico rayo de luz, que me ilumino el día… -
-          Me encantaría contarte todo, pero no puedo, solo puedo decirte que lo que hice fue por amor
-          Ahórrese su sermón Señor Jackson, yo no me voy de aquí hasta que me explique todo con lujo de detalles – Decidida se sentó al frente mío, esperando una respuesta concreta a tan trillado problema… -
-          Pero…, Janet es enserio si te lo cuento me puedo meter en problemas
-          No estoy escuchando lo que quiero hermano, sabes que me irrito muy rápido, no te conviene que me enoje
-          Esta bien tu ganas, pero esto no es fácil
-          No me digas, esto me huele a obra de mi padre
-          Pues si, me amenazo con hacerle daño a Kimberdly si no la dejaba, no quería que nada le pase, por eso hice todo ese teatro…
-          Algo me decía que era eso, pero Mike como te dejaste influenciar por él
-          ¡Amenazo la vida de mi princesa!, ¿No es acaso suficiente motivo?
-          A veces no me creo lo inocente que eres, bien sabes que perro que ladra no muerde; Joseph suele hablar como loco, pero nunca hace nada…
-          Estaba confabulado con Cecilia, esa mujer no me dio buena espina, creí que con ayuda de esa arpía sus palabras no se quedarían solo en eso, si no se volverían acciones concretas…
-          Bueno tu razonamiento es… ¡absurdo!, esa tiene boca de víbora pero no mata ni una mosca, al igual que nuestro padre, solo habla porque tiene boca, vamos Mike pensé que eras inteligente…
-          Gracias hermanita, es que simplemente en ese momento no razone, me inundó la desesperación, el miedo…
-          Lo se Michael, se lo dramático que eres, y… bueno… solo quería… pedirte una dis… discul…
-          ¿Disculpa?
-          Si eso, por lo de esa noche, ¡Uff!, ¡Que difícil es pedirlo!
-          No me has pedido disculpas Janet…
-          No me lo hagas tan difícil hermano
-          Eres una complicada, jajajaja – Que bien me hace hablar con mi hermana, se que a veces no nos llevamos muy bien, pero adoro su sinceridad y la seguridad que transmite su presencia… -
-          Si lo se jajajaja, ya enserio Mike, tienes que solucionar todo, asumo que Kim debe estar muy dolida, intente comunicarme pero nadie me responde en su casa
-          Pero como voy a hablar con ella, si mi padre me amenazo con…
-          No sigas con eso, sabes que no hará nada, es un cobarde
-          ¿Tú crees?
-          No lo creo, es más, te lo aseguro, ahora ve antes de que sea muy tarde, arréglate, ponte guapo para ella, pero sobre todo dile la verdad, se que Kim es una mujer razonable, si le explicas lo entenderá todo…
-          Porque será que cada vez que hablo contigo me siento mejor, a la vez de que tomo muy buenas decisiones…
-          Mi sola presencia lo mejora todo…
-          Ok señorita modestia, ahora déjame solo, quiero arreglarme para ver a mi princesa... – Comencé a empujarla fuera de mi habitación, si no lo hacia no pararía de hablar todo el día… -
-          No es necesario que me empujes Mike, ya me voy…
-          Pero antes, ven… - Abrace tiernamente a mi dulce hermanita, le di las gracias por su sabia madures y su inigualable simpatía… -
-          Ahí suéltame Michael, me contaminas con tu ternura niño bueno…
-          Eres malvada, jajajaja
-          Lo se jajajaja, bien nos vemos Mike y recuerda piensa bien las cosas…
Janet desapareció de mi vista mientras en mi interior había dejado sembrado un granito de esperanza, ese rayo de luz, esa fuerza que necesitaba lo era mi hermana, quien siempre logra sacarme de los mas oscuros y recónditos vacios de mi alma…
Una vez listo, partí rumbo a la residencia de mi princesa, dispuesto a hacer lo que sea con tal de recuperarla, de estrecharla entre mis brazos y besarla intensamente para que sienta todo el amor que le tengo y le tendré eternamente…
Para mi sorpresa las puertas de la mansión de Kimberdly estaban abiertas de par en par, toque la bocina de mi auto varias veces pero nadie respondió, decidí arriesgarme entrando a la casa sin autorización, lo que puede hacer una persona enamorada ¿No? …
Salí del auto con bastante prisa, camine sigilosamente mientras contaba  mis pasos, 30 si es que no me equivoco, fueran las veces en que pensé cual seria la reacción de ella cuando me viera, no pude determinar una emoción, ni sentimiento concreto, pero creo que se más o menos a lo que me voy a enfrentar…
Toque lentamente la puerta con mis nudillos, espere un momento a que me respondieran, pero nada, nunca había escuchado tanto silencio en esa casa que es pura alegría, risas y bromas sin fin…
Nuevamente azote la puerta esperando alguna señal de vida, pero fue inútil, resignado abandone el lugar, pero…
-          ¿Michael? – Esa voz, claro que la conozco; gire lentamente sobre mis talones para encontrarme con la sorprendida mirada de Lupita, quien me observaba con un toque de odio, nada característicos de ella… -
-          Lupita, Hola, solo quería saber si es que puedo hablar con Kimberdly
-          No, no puedes, ella no esta
-          ¿Dónde puedo encontrarla?
-          No creo que quiera verte
-          Pero necesito hablar con ella, hay muchas cosas que explicar
-          Lo siento no puedo decirte nada, adiós
-          Espera – Tome su brazo antes de que me tirara la puerta en el rostro – Si no esta ella, déjame al menos explicarte a ti que paso, se que me entenderás después de lo que te diga…
-          No lo se, no creo…
-          Por favor…
-          Tienes 5 minutos para explicar todo el mal que hiciste aquella noche…
-          Gracias
-          Pasa y siéntate, mide tu tiempo que es corto al igual que mi paciencia…
-          Así veo, iré directo al grano, esa noche no fue de las buenas, mi padre me amenazo con hacerle daño a Kimberdly si no la dejaba de la manera más vergonzosa y dolorosa que exista, Cecilia y Joseph estaban confabulados en contra de mi amor hacia mi princesa… - Baje el rostro mientras las lagrimas me fueron inevitables, recordé todo velozmente y les juro, me partió el alma ver como le destrozaba el corazón al amor de mi vida… -
-          Valla, no se que pensar Mike, pero algo me dice que es verdad, si el nombre de Cecilia esta aquí, es algo muy malo…
-          Si, esa mujer es un demonio,  ahora quiero remediar el error que cometí, necesito hablar con Kim…
-          Llegas muy tarde mi niño, ella se fue, partió rumbo a una nueva vida, lejos de ti… - Nanny irrumpió dándome lo único que me temía oír, ¡Dios!, que hiciste cariño, ¿Por qué te fuiste?...-
-          Pero, ¿Cuándo?, ¡No!, ¿Por qué hizo esto?, ¡Demonios!
-          Tranquilo Niño, era definitivo que no quisiera estar aquí, tenia herida el alma y el corazón destrozado
-          Lo siento… - Rompí en llanto, estaba demasiado sensible, era obvio que no resistiría una noticia como esta, una comprensiva Lupita me tendió su hombro para consolar mi atormentada y desolada vida… -
-          Tranquilo Mike, entiéndela, esta muy confundida, tiene demasiados sentimientos encontrados, yo pienso que la lejanía que los divide, unirá con una lazo irrompible, el amor que ambos se tienen…
-          Lo crees… - Alce mi rostro para encontrarme con su sincera sonrisa, mi amiga no me mentía, tal vez ella estaba en lo cierto… -
-          Claro que si, ahora trata de tranquilizarte, y sonríe Mike, Sonríe…
-          Lo hare, te lo prometo, dime algo…
-          Si claro, te escucho
-          ¿Dónde esta Kimberdly?...
-          Bueno ella esta en Francia, es verdad se fue con Luna, la recordaba a ti, y quiso llevarla…
-          Oh, Kimberdly, mi amor, ¿No crees que debería ir a verla?
-          Pues yo pienso que si, se aman demasiado necesitan estar juntos…
-          Si… ¡Eso es!, ¡Gracias, Gracias!, ¡Parto hoy mismo a Francia!, la buscare por cielo, mar y tierra, ¡Adiós Lupita!, ¡Adiós!
-          Valla este chico es bipolar, esta triste y luego salta y grita como loco, ¿Quién lo entiende?
Corrí a toda velocidad fuera de la casa, tome mis llaves y encendí el auto, acelere el motor a su potencia máxima, casi como para volar por el cielo, llegue a casa, tome una maleta y metí en ella algunas cosas que me serian útiles, partí rumbo al aeropuerto con una gran esperanza, la de recuperar a mi bella princesa, recuperar su confianza, su amor, su sonrisa y esos bellos ojos que son la luz que ilumina mi sendero…

15 ago 2011

Capítulo 14

El dolor que mi corazón sufría, era en pocas palabras… indescriptible; el amar sin ser amada, dejo mi alma quebrada, pero no creo que sufrir no me ha servido, es una forma de no volver a cometer el mismo error…
Mientras narraba la genial historia de mi vida; me sorprendía a mi misma lo fuerte que me mostraba, no derrame ni una lagrima, aunque mi alma se martirizaba al recordar, solo se que para mi cambio;  me era necesario guardarme ese dolor… para mi sola…
-          No sabia nada de eso Kim, imagino que debes de sufrir mucho; una traición es lo peor que le pueden hacer a alguien – Max se puso cabizbajo, su resplandeciente mirada se vio envuelta por la inevitable neblina que causa el recuerdo de un dolor pasado…. –
-          No creas Max, me siento mucho mejor sin él, pero dejemos de hablar de mi, ¿Qué es lo que te pasa?, ¿Por qué estas así?
-          Porque el amor de mi vida me rompió el corazón, me abandono sin una explicación, aunque prefiero no recordarlo… - De pronto comenzó a sollozar en silencio, no quería que lo viera así, estaba devastado… -
-          Max, no llores amigo, por favor no sufras, prometo no preguntar nada que te cause dolor – Sostuve su rostro entre mis manos, haciendo que me mirara fijamente, me sonrió y de repente me abrazo, no le negué ese contacto, creo que lo necesitaba, al igual que yo, necesitaba un hombro donde consolarme…
Estuvimos así por un buen tiempo, no me contuve y también rompí en llanto, creo que el ser fuerte no es para mi, ¡Dios! ¿Por qué tenia que hacerme esto?, si ni siquiera le di motivos, le entregue mi amor sin medidas, y si no se lo dije fue por miedo, por timidez, pero siempre trate de demostrárselo de cualquier manera, esto no era justo, nunca le voy a perdonar lo que me hizo, que ni se atreva a hablarme, ni en un millón de años…
Max me soltó de repente, me miro tiernamente, mientras esbozaba una hermosa sonrisa…
-          ¿Qué hacemos llorando así?, no valen la pena Kim; no se merecen que suframos así por ellos, ¡Que se los trague la tierra!, no quiero saber nada de esa mujer en mi vida…
-          Tienes razón Max, no tienen derecho a una sola lágrima de nosotros, yo tampoco quiero saber nada de ese hombre, ni en un millón de años…
Reímos alegremente ante nuestras palabras, ambos ocultamos la terrible depresión que nos destrozaba el alma…
Toda la noche, acobijados bajo el calor de la chimenea, hablamos sobre nuestras vidas, esquivando de mil formas, el toparnos con algo que nos recuerde a nuestros adorados tormentos…
Los primeros rayos de la mañana se filtraban tímidamente por las cortinas de la pequeña ventana de la sala, Max descansaba a mi lado en la cómoda alfombra que nos rodeaba, ¡Rayos!; me quede dormida, mis amigas deben de estar buscándome, y yo aquí muy tranquila, debo irme ya...
-          ¡Max!, ¡Max!, despierta por favor, tengo que irme… - Comencé a moverlo delicadamente, haciendo que me gruñera divertido… -
-          No mamá, cinco minutos más…
-          Jajajaja, Max no soy tu madre, vamos niño levántate, quiero volver a mi casa…
-          Ay, ya voy, es que nadie respeta el sueño de los demás
-          Pues yo no, y menos si no se como regresar a casa
-          Lo siento Kim, pero cuando me levanto me enojo
-          No te preocupes, yo soy igual
-          Jajajaja, entonces felizmente no te levante yo, si no tu solita por tu cuenta
-          Es verdad, sino hubiera sido terrible jajajaja
-          Bien, voy a darme un baño y ponerme otra ropa, espérame si
-          Claro yo te espero
Max desapareció en cuanto termino de hablarme, me levante de ahí para acercarme lentamente a la ventana, abrí las cortinas de golpe y recibí alegre los intensos rayos del sol, esto era maravilloso,  abrí los brazos y comencé a reírme tal como una niña, me sentía libre y llena de vida, por un momento olvide todo, pero de pronto unos brazos rodearon mi cintura, voltee sorprendida mientras me topaba con mi príncipe, estaba ahí, parado frente a mi, sonriéndome tan dulce, no aguante las ganas de abrazarlo, ¡Dios! Era tan hermoso verlo, tome su rostro y lo bese, sus labios tan dulces, me llevaron al cielo en un instante…
-          Kim, niña que le haces a mi cojín – Abrí los ojos, Max me observaba extrañado, completamente absorto, yo sostenía entre mis brazos uno de los almohadones de su sofá, ¡Demonios!, todo fue un sueño… -
-          Jajajaja – reí nerviosa, mientras devolvía el cojín a su lugar – nada, solo lo estaba acomodando, lo vi arrugado, quería ponerlo bien…
-          Ok… y para eso tenias que besarlo
-          Ah, no es eso, debes de haber visto mal
-          Claro, como digas, ve a bañarte, ya puse algo de ropa de mi hermana para ti, y tu ropa de ayer ya esta seca
-          Muchas gracias, jajajaja
-          Eres muy rara sabes, jajajaja
-          Si lo se, pero que le puedo hacer…
-          Pues nada, ya estas sentenciada a ser así por siempre jajajaja; te veo luego voy a preparar algo, muero de hambre, deseas algo
-          Si tanto insistes, claro
-          Ok, pero ve a vestirte, se hace tarde
-          Si es cierto, voy – Corrí a su recamara, mientras Max me observaba divertido, cerré la puerta detrás de mi y fui apresurada a tomar mi baño…
Una vez lista y satisfecha por el rico desayuno que Max me preparo, estaba preparada para enfrentar todo lo que se me venia, regreso a mi realidad, a mi agitado mundo…
Mi amigo me ofreció amablemente llevarme hasta mi residencia, nos subimos en su auto camino a mi hogar, llegamos rápido, me despedí de él con un gran abrazo, un tierno beso en la mejilla y una segura promesa de volvernos a ver, algún día…
Me apresure en llegar a casa, abrí sigilosamente la puerta esperando no despertar a nadie, demasiado tarde todas estaban esperándome, con los brazos cruzados y una mirada preocupada, examinándome por completo buscando algún desperfecto en mi , pues no llegue en toda la noche, seguro estaban con el alma en un hilo, me siento tan culpable…
-          ¡Ay! Mi niña, ya estas aquí ¡Gracias Dios! ¡Gracias! – Nanny corrió a abrazarme mientras lloraba desconsolada, yo la recibí feliz de verla de nuevo, Lupita y Lucy también se unieron al abrazo, era tan bueno estar en casa y tenerlas conmigo era mi mayor consuelo… -
-          Lo lamento mucho, pero no estaba muy bien ayer, fue una noche terrible no creen, jajajaja – Me separe de ellas mientras reía sínica, no quería mostrarme débil y mucho menos destruida, como en realidad me sentía… -
-          Pero… pero si anoche fue espantoso y estas así de feliz – Las tres me observaban absortas, Lupita fue la única que se atrevió a encarar mi rara conducta –
-          Vamos Lupita, porque debo de estar mal, si él quiso hacerme el ridículo, pues que lo haga, a mi no me duele, en lo absoluto…
-          Te escucho y no lo creo, tu no eres así
-          No siempre voy a ser la misma sentimental de siempre, debo de ser fuerte ante esta situación, no quiero destruirme, entiéndanme por favor, esto es una barrera, no quiero deprimirme, no saben cuanto me duele, de verdad me duele… - Las lagrimas no tardaron en llegar, ellas me miraban con ternura, corrieron a abrazarme, de verdad estaba desecha… - Gracias por su apoyo…
-          Ni lo agradezcas nena, sabes que cuentas con nosotras – Lucy tomo mi barbilla entre sus manos para mirarme con ternura mientras lloraba tan desconsolada como yo... –
-          Eso es verdad mi niña, siempre estaremos aquí para ti
-          Gracias Nanny, gracias chicas; pero debido a lo acontecido anoche he tomado una difícil decisión
-          ¿Cuál? – Las tres hablaron en coro, arrancándome una fugaz sonrisa… -
-          Bueno creo que es mejor que me valla de aquí, he decidido viajar a Francia, donde se dará inicio la gira que estaba planificando, solo que mi estadía halla será permanente, no creo que soporte vivir en Los Ángeles, me trae muchos recuerdos y me hacen daño…
-          No mi niña, como que piensas irte
-          ¡No nos puedes dejar! – Lupita y Lucy, lo dijeron en coro, mientras me miraban suplicantes y se sujetaban las manos… -
-          Pero quien dijo que las voy a dejar, ustedes se vienen conmigo, vallan preparando su equipaje ¡Nos vamos a Francia!
-          Ah…,  este… ahí como decirte, lo que pasa es que…, no puedo decírselo, dilo tu Lupita
-          Pero ¿Qué pasa?
-          Mira Kim, es que no podemos ir contigo, debido a que hace poco nos inscribimos a un curso de cosmetología, estamos preparándonos para cumplir nuestro sueño
-          Y ¿Por qué no me dijeron nada?
-          Es que estabas muy ocupada con la grabación de We are the world, los ensayos de la gira y demás cosas, que no quisimos decirte hasta que todo pase…
-          Ahí chicas lo siento, las tenia muy abandonadas, bueno entonces tendré que irme sola
-          Lo lamentamos mucho Kim, enserió
-          Lose… no se preocupen… ¡Oh! Pero Nanny, tu puedes acompañarme…
-          No mi niña lo siento, pero tengo que cuidar a mis hijas…
-          Bueno, me resigno, tendré que viajar sola, las extrañare mucho - Abrace a cada una en señal de despedida, era tan doloroso hacerlo, ya deje a mi familia una vez, ahora vuelvo a lo mismo… - Es verdad, la casa es toda suya, hagan lo que quieran con ella, se que esta en buenas manos…
-          No te preocupes niña, la cuidaremos bien
-          Nos veremos pronto
-          Eso espero chicas, eso espero – Subí lentamente hasta llegar a mi habitación, al abrirla encontré a una emocionada Luna saltar sobre mi, ¡Dios!, mi dulce cachorro me trae tantos recuerdos…, Esperen ya no estaré tan sola, iré con mi pequeña amiga…
Tome en brazos a Luna mientras me dirigía al balcón de mi alcoba, quería ver por última vez el bello prado que rodea cada rincón de mi hogar, sentir la fresca brisa sobre mi rostro, sentirme viva…
Una vez fuera de mi trance y de nuevo a mi realidad, entre a mi habitación en busca de maletas y algo de ropa, busque todo lo que me seria necesario a mi y por supuesto a Luna, no quería demorar el viaje, necesitaba irme ya…

Hice algunas llamadas a la agencia de viajes, buscando un transporte cómodo y privado, pero sobre todo un permiso especial para llevar a mi cachorro; también me puse en contacto con una inmobiliaria en Paris, para buscar un departamento donde permitan mascotas; por ultimo llame a Valeria para comunicarle mis planes y que sepa que estoy bien…
Partí rumbo a Francia en un vuelo de madrugada, lo creí prudente, ya que no quería causar un alboroto en el aeropuerto…
Esto seria difícil, tendré que empezar una vida nueva,  aunque esta vez será debido a mi cobardía, a mi falta de estabilidad emocional, a mis miedos; ya que estoy segura que si Michael se apareciera en mi casa, no tendría el valor para encararlo, es más correría a sus brazos pidiéndole que olvidemos todo y que regrese conmigo, sin importar el daño que me hizo…, no quiero que eso pase, por eso huyo lejos de todo y todos…, lejos de mi amado príncipe…Michael…

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Hi ^^ , bueno queria informar que debido a mi error, mi terrible error geografico, ya que no soy muy buena en esa materia, con las justas se donde estoy parada ¬¬ :P, el destino que tiene Kim, no es Italia, si no Francia, directo a Paris (mi ciudad preferida XD), eso queria decirles ademas de agradecer infinitamente que lean esta historia, que es un pequeño sueño el cual siento cumplirse cada vez que escribo esta novela ^^, Mil gracias y millones de benciones mis lectoras, cada una es un amor, unica e inigualable, no lo olviden eh ;D ^^ Las quiero muchisimo!!!!, espero que les guste, dejenme sus opiniones son valiosisimas para mi ^^

22 jul 2011

Capítulo 13

¡Nunca imagine llorar tu engaño! ¡¿Por qué Michael, por qué?! -  Repetí miles de veces lo mismo a todo pulmón en plena calle, tan desierta que parecía que yo fuera la única muestra de que existiera vida en aquel espacio del universo…
Deambule con la mirada perdida y rumbo desconocido durante toda la noche, lo único que me acompañaba era las finas gotas de lluvia que me recorrían entera, y los estruendosos rayos, que alguna vez temí, ahora me eran indiferentes y a la vez relajantes remedios para tan cruel dolor que me carcomía el alma…
Agotada y completamente sola me deje caer sobre el pavimento sin miedo a hacerme daño, sin sentir absolutamente nada, solo ese intenso dolor en mi corazón, nunca me habían lastimado tanto, Michael me había mentido todo el tiempo sobre el “amor” que decía tenerme, y yo como tonta caí en sus redes…
-          ¡Maldito mentiroso!, ¡Te odio Michael Jackson!, ¡Te odio! – Definitivamente ese hombre se merece todo mi odio y desprecio, tanto tiempo fingiendo un amor que no me tenia, jurándome que me ama como a nadie, ¡Ja!, que idiota fui, que ¡Idiota!...-
Una sombra irrumpió mis pensamientos y fulminantes palabras, me acogió con el paraguas que traía, y no permitió que la lluvia llegara a mi por varios minutos, solo se quedo ahí en silencio, comencé a preocuparme, ¿Qué hacia alguien en plena noche y con una lluvia de dimensiones catastróficas?...
-          ¿Qué quiere? -  Pregunte desafiante, con una fuerza que jamás creí tener, no voltee y espere segura una respuesta pronto…
-          Solo ayudarte… - Su voz tan dulce y varonil me hicieron sentir segura por primera vez en todo esta tormentosa noche, pero mi dolor me hizo crear una barrera contra todo el que se me acerque…-
-          ¿Para que? Yo no le eh pedido nada, retírese…
-          No sea tan cortante y mal educada señorita, solo quiero ayudarla, no querrá pescar un terrible resfrió, o tal vez una fuerte neumonía, vamos déjeme llevarla a su casa para que se cambie…
-          No quiero, vallase y déjeme sola – Voltee a verlo desafiante, él solo se limito a sonreír mientras me ofrecía amablemente su mano…
-          Venga, no le voy a hacer nada
-          Esta bien – Dije rendida ante la única muestra de amabilidad y nobleza que recibía durante toda la noche, una vez de pie, me sentí débil y tambalee un poco, él sujeto mi brazo para evitar que me dañe… - Gracias…
-          No es nada señorita, que despistado, no me eh presentado soy Maximiliano Fonseca, pero llámeme Max, un gusto conocerla
-          El gusto es mío Max, yo soy Kimberdly Montiel; disculpe mi arrogancia pero he pasado un momento muy desagradable y estaba un poco fastidiada
-          No se preocupe Kimberdly… ¿Qué?, ¿Es usted Kimberdly Montiel?, Valla señorita usted es increíble, admiro mucho su trabajo, canta excelente
-          Muchas gracias, pero llámeme Kim, no me gustan mucho las formalidades
-          Como diga Kim, bien déjeme llevarla a su residencia, creo que debe descansar y darse un baño
-          Si, pero no quiero… no quiero…
-          ¿Qué tiene?, ¿Se siente mal?
-          No se; me siento mareada… - Fue lo ultimo que dije, no se que me paso pero de pronto todo se nublo, me desvanecí de pronto, solo sentía como unos fuertes brazos me tomaban entre si, para no dejarme caer…
Abrí los ojos lentamente, mientras me disponía a sentarme en el sofá donde me encontraba acostaba… Esperen ¿Sofá?, pero si yo estaba en la calle, que hago sentada aquí, ¿Dónde estoy?... Me desespere un poco y abrí de golpe los ojos intentando levantarme, un atónito Max me observaba a lo lejos y ante mi confusión se acerco poco a poco a mi…
-          No te asustes Kim, te traje a mi departamento porque te me desmayaste en media calle, no sabia que hacer, solo opte por traerte aquí
-          Muchas gracias Max, que amable eres
-          Es un placer, pero quiero pedirte algo
-          Si dime
-          Puedes cambiarte, tengo ropa para prestarte y puedes ducharte con agua caliente, no quiero que te enfermes, tu ropa esta húmeda, me preocupas.
-          Te agradezco, pero no quiero incomodar
-          No incomodas linda, ven… - Max tomo mi mano y me ayudo a levantarme, me llevo hasta la recamara principal, la cual asumí era suya, me guio hasta el baño y me dejo ahí, me hizo una pequeña seña, como un “Espera ahí”, luego desapareció de mi vista…
Gire sobre mis talones y observe todo a mi alrededor, mientras todo lo que me había sucedido en el día volvía a mi como una extraña y ridícula pesadilla; mi mente trato de imaginar por un momento, que todo lo que paso, en realidad jamás sucedió, y me imaginaba todo de nuevo normal, las visitas de Michael, nuestras hermosas salidas y todo lo que alguna vez considere mágico y verdadero, hoy se mostraban ante mi como una maraña de mentiras que me estaban enredando en la más cruel soledad…
-          Listo, aquí tengo un pijama de mi hermana, ella hace mucho que no vive conmigo, pero dejo mucha ropa que jamás uso, según ella no eran de su agrado, espero te sientas cómoda -  Max irrumpió en el lugar sacando de mis profundos pensamientos, le agradezco que haya aparecido en ese momento, necesitaba que alguien me sacara del terrible encierro en el que me estaba metiendo… -
-          Gracias, y claro que me sentiré bien, con tu gentileza y buenos tratos no has hecho más que alegrarme la noche
-          No es nada -  Dijo mientras sonreía y… ¿Es lo que me imagino?, se esta sonrojando, hay, ¡No!, no por favor, es que, se parece tanto a él… - Es un placer para mi poder ayudarte, te dejo sola para que puedas cambiarte, te estaré esperando en la sala
-          Claro, en un momento te veo – Desapareció de mi vista tal cual rayo, mientras yo me quedaba sola, imaginándome repetidas veces, su sonrisa, sus abrazos, sus palabras de afecto, sus besos… imaginándome a ese Michael, a mi príncipe de cuento, que creo, jamás podre olvidar… -
El agua caliente ahuyento de golpe mis tétricos pensamientos, era hora de que mi mente y corazón olviden el pasado, y puedan poco a poco reconstruir mi presente, mi vida tiene que seguir, tengo familia, contratos millonarios, una gira mundial en puertas, pero… nada hará que me olvide de él, no se como podre borrar de mi mente sus intensos y hermosos ojos que me miraban fijos y dulces cada vez que no le contaba algo, sus travesuras, su ternura, sus besos llenos de un amor que creí verdadero, ¡Dios!, este hombre va a matarme de  depresión, y aun así lo seguiré amando, como el primer día en que lo vi cruzar esa puerta, y llego como si nada a mi solitaria vida, para llenarla como nadie podría hacerlo…
Las lágrimas recorrían mi rostro mientras lo recordaba, era inevitable, había sido y será el amor de mi vida, no me seria nada fácil olvidar…
Como sea me reanime a salir adelante, no podía echar mi vida por la borda como si nada, estoy dispuesta a dejar de ser quien soy…
-          “Hoy me juro ser fuerte y dominante, no permitiré que nadie juegue conmigo, en cambio yo jugare con quienes se atrevan a siquiera pensar en hacerme daño… ¡Lo juro!…” – Luego de este gran cambio en mi persona, todos deberán de aceptarme, ya que esa Kimberdly que conocieron, murió, y en cambio llego una mas fuerte y obstinada, soberbia y dura, para que así nadie vuelva a herirme, como lo han hecho esta noche…
Entre a la habitación para arreglarme, envolví la ropa que traía puesta y me dirigí a la sala al encuentro de mi nuevo amigo…
-          ¡Max! ¡Ey! – Logre sacarlo de su segura meditación, se sobresalto un poco, pero solo reacciono dándome una linda sonrisa –
-          Pequeña me asustaste
-          Lo siento pero te veías tan concentrado que no pude evitar hacerlo, dime ¿En que tanto piensas? – Dije mientras me acomodaba a su lado, esperando segura una respuesta –
-          Pues, estaba pensando en ¿Qué hace una chica tan linda llorando por las calles como alma en pena, sola y desesperada?, claro si es que quieres hablar de ello…
-          Si, deseo platicarte todo, sabes me generas mucha confianza, y bueno necesito desahogarme, porque no puedo cargar con todo este dolor yo sola…
-          Estoy dispuesto a escucharte y agradezco mucho la confianza que me tienes, te prometo no fallarte
-          Se que no lo harás – Lo mire firmemente a los ojos mientras tomaba su mano, esto era una forma de reafirmar mi confianza hacia él, su mirada era pura y dulce, características muy difíciles de encontrar en alguien, y agradezco al cielo que me lo halla puesto en mi camino… -
Con mucho dolor comencé a contarle todo lo que me había pasado en estos últimos meses, la ilusión de haber encontrado al amor de mi vida y el ver como me traicionaba habían calado mucho en mi, después de esto ya nada será igual… Nada…
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Disculpen la terrible demora, pero estaba en un momento un poco dificil, he tenido muchos trabajos, examenes, demasiada presión, la cual atasco mi mente, y bueno no me premitio seguir escribiendo, pero yo no dejo las cosas a medias, yo me dispuse a terminar mi primera novela, y lo voy a hacer, tengo maximos una semana de vacaciones, la cual aprovechare al maximo para escribir y ponerlas al dia mis amadas y fieles lectoras, espero sus comentarios!!! ^^


Cuidense muchisimo y mil bendiciones para todas!!!!


Espero les guste el capítulo!!! =D


Atte. Kim :D